Comer sin hambre..

"Comer sin hambre, Beber sin sed y Amar en todo tiempo, es lo que mas diferencia al hombre de los Animales Superiores"
Pierre-Augustin de Beaumarchais

lunes, 26 de octubre de 2009

LA VIDA VA Y VIENE

La vida es como un guinguilingongo,
Sube y baja, baja y sube, A veces se gana a veces se pierde.

En mi vida de todo he hecho y a lo mejor he hecho muy poco
Sube y baja baja y sube marea poderosa poderosa resacanada se detiene,
Es una barca que no llega a puerto si te bajas, ya es muy tardepara volver a subir; Mejor es seguir con las velas al viento peinando las barbas enmarañadas delas tormentas.

Trepada en lo alto de un nido de pájaro me puse a mirar mi vida como colgada de un balcón Imaginario igual que un actor ausente de una extraña tragicomedia.

No me arrepiento de lo vivido lo bailado nadie me lo quita, lo que hice sin duda lo volvería a hacer
Ya nada quiero de la vida me ha dado mas de lo que he devuelto y las cosas que quedaron por hacer, quizás, quien sabe, una nueva vida habrá como tiempo suplementario para otra estación de siembra y otra de cosecha.

La vida es como un ginguilingongo,
Sube y baja, baja y sube, A veces se gana a veces se pierde.
Rosa Amelia Alvarado Roca
Ecuador

sábado, 24 de octubre de 2009

HAGAMOS UN TRATO

Compañera usted sabe puede contar conmigo
No hasta dos o hasta diez sino contar conmigo
Si alguna vez advierte que la miro a los ojos
Y una veta de amor reconoce en los míos


No alerte sus fusiles ni piense qué delirio a pesar de la veta
O tal vez porque existe usted puede contar conmigo
Si otras veces me encuentra huraño sin motivo
no piense qué flojera igual puede contar conmigo


Pero hagamos un trato yo quisiera contar con usted
Es tan lindo saber que usted existe uno se siente vivo
Y cuando digo esto quiero decir contar aunque sea hasta dos
Aunque sea hasta cinco no ya para que acuda presurosa en mi auxilio
Sino para saber a ciencia cierta que usted sabe que puede contar conmigo.
Mario Benedetti
Uruguay

miércoles, 21 de octubre de 2009

Tiempo del Hombre

La partícula cósmica que navega en mi sangre
es un mundo infinito de fuerzas siderales.
Vino a mí tras un largo camino de milenios
cuando, tal vez, fui arena para los pies del aire.

Luego fui la madera. Raíz desesperada.
Hundida en el silencio de un desierto sin agua.
Después fui caracol quién sabe dónde.
Y los mares me dieron su primera palabra.

Después la forma humana desplegó sobre el mundo
la universal bandera del músculo y la lágrima.
Y creció la blasfemia sobre la vieja tierra.
Y el azafrán, y el tilo, la copla y la plegaria.

Entonces vine a América para nacer en Hombre.
Y en mí junté la pampa, la selva y la montaña.
Si un abuelo llanero galopó hasta mi cuna,
otro me dijo historias en su flauta de caña.

Yo no estudio las cosas ni pretendo entenderlas.
Las reconozco, es cierto, pues antes viví en ellas.
Converso con las hojas en medio de los montes
y me dan sus mensajes las raíces secretas.

Y así voy por el mundo, sin edad ni destino.
Al amparo de un Cosmos que camina conmigo.
Amo la luz, y el río, y el silencio, y la estrella.
Y florezco en guitarras porque fui la madera.

Atahualpa Yupanqui
Argentina